miércoles, 30 de diciembre de 2009

Gracias por todo y por nada.

Querido 2009:
...

Durante los 364 días que llevas aprendí mucho de ti,
sé que estas cansado y apenas logras arrastrar tus últimas horas por los campos de esperanza
que aguardan la llegada de tu sucesor.
No quiero pedirte algo, ya que todo lo que me diste no lo desee y luché por todo lo que desee sin que me lo pidieran.

Comencé esta travesía por tus vastos caminos con optimismo
esperando... si, eso... simplemente esperando. 
Así aprendí la primera lección. Solo espera quien duda. 
O al menos eso me gusta pensar.

Pero no quiero hacerte un recuento de cada una de los aspectos de mi vida que debí cambiar o fortalecer para no ser uno más agobiado por deidades ausentes o sentimientos intermitentes.
Y aunque ahora sé que me gustan las fresas con crema, 
que la lluvia no es tan fría como parece,
una madrugada puede cambiar todo un recorrido de amistad, también lo puede hacer un error estúpido.
Porque jugar no siempre es divertido, 
tampoco lo es perder. 
Para alcanzar algo que nunca has tenido, debes hacer algo que jamás has hecho. 
El tiempo no cura nada. Solo nos gusta engañarnos, creyendo que podemos olvidar. Que ridículos podemos ser.
Y aun falta... demasiado.

Pero aunque te despidas, de esta manera abrupta, me enseñaste a...

No me enseñaste nada, solo fuiste simple tiempo que coincidió con eventos desafortunados, compañeros de cuarto en el tren de la vida... solamente compañeros, ni camaradas y mucho menos amigos.
Solo fuiste... exacto.. solo fuiste. 

Gracias y buen viaje.

martes, 29 de diciembre de 2009

Diario de navegación: Calma relativa.

"Creo que siento algo... ¿Qué es?" ...

El día avanza de manera tranquila,
el silencio que me envuelve es ensordecedor.
Estoy lejos de la orilla, supongo.

Durante un tiempo intenté estudiar a las gaviotas que sobrevolaban cerca,
intentando descifrar que es lo que en realidad busco,
ha pasado mucho tiempo y aun no lo comprendo.
Este bote cada vez es más pequeño. ¿o será mi imaginación?

El sol de mediodía siempre es insoportable, 
pero vale la pena para hacerme sentir vivo, 
si no fuera por eso no sabría realmente si lo estoy.

Hasta este día no había notado que tan profundas son las aguas sobre las que navego,
si es que se le puede llamar navegar a esto; Mas bien, solo soy empujado por débiles corrientes.
Sigo sin rumbo, sin destino. 
Me pregunto porque no traje remos. Ya es muy tarde.

El cielo luce despejado pero el viento se siente demasiado pesado. 
Se avecina una tormenta, lo sé. 
...

domingo, 27 de diciembre de 2009

Diario de navegación: Deseos y ambiciones.

Quien comete el error de entrar en tu territorio
solo puede ser estúpidamente valiente o valientemente estúpido.


...

Es casi imposible no enamorarse de tu belleza rebelde.
A veces tan exótica, algunas veces tan calma.

Algunos deciden solamente jugar en la orilla,
por miedo a tu naturaleza impredecible.
Otros arriesgan todo lo que tienen por domar lo indomable,
con más fe que determinación. 

Sin puertos de embarque o majestuosas carabelas,
sin provisiones, sin salidas de emergencia.
Sin nada más que el deseo, 
el coraje, una canción, dos monedas:
la locura y la razón.

Sin orientación alguna, más allá de la que su corazón pueda improvisar,
no hay tiempo para despedidas, no hay tiempo para mirar atrás.
En la pequeña embarcación apenas y caben sus dudas,
pero no hay más opción que continuar. 
...

viernes, 25 de diciembre de 2009

Resaca

Si algo queda... Podría ser esto.
...

Por fin silencio absoluto,
tranquilidad, no eterna, pero eternamente agradable.
Al menos no quedó tan sucio como en años anteriores,
¿Crisis o evolución?. Cualquiera funciona.

La mañana comenzó hace un par de horas o un poco menos,
pero nadie parece haberlo notado. 
El ruido del viento arrastrando papeles y el canto tímido de algunos pájaros son el único indicio de vida, porque ni el sol tiene ánimos calentar esta mañana.

Por fin un instante de felicidad. 
Que lindo es el mundo sin humanos habitando en el. 

jueves, 24 de diciembre de 2009

Feliz Navidad

¿Feliz?... ¿Para quien?
...

Para quien en este momento celebra,
para quien llora de felicidad,
para quien anhela ese preciado encuentro.

Para quien ríe y disfruta,
para quien no se detiene,
para quien todo lo tiene,
para el que todo desea.

Para ese tal olvidado,
para el que esta en todos lados,
para dos o tres más.

Para quien no recuerda,
para quien prefiere no ver,
para el que no quiere sentir
o para el que simplemente no siente.

Para quien no pasa frío,
para los que no pasan hambre,
para los que esperan,
para los que reciben.

Para los ignorantes,
para los que celebran,
para los que proclaman,
para los que inventan.

Para los vacíos,
para los consumistas, 
para los hipócritas...

Para esos cristianos que celebran el nacimiento del Salvador, 
y al mismo tiempo olvidan al prójimo en un rincón.

Para esos que quieren tenerlo todo, 
para los egoístas.

Porque hay tanto que olvidamos en esta fecha,
porque decir "Feliz navidad" basta....
para apagar las penas de adolorido,
para calentar al desprotegido,
para saciar la sed de quien ruega por esperanza, 
por un poco de paz.

Para quien no tiene nada y aun así es feliz,
para aquellos que luchan por vivir,
para los que se aferran a la vida,
para los que en verdad merecen,
para los que en verdad nunca reciben.

Para los que aman,
para los que entregan,
para los que hacemos a un lado,
para ellos que sonríen,
para ellos que agradecen,
para los que en verdad sienten 

Para los que en especial este día olvidamos, rechazamos,
para los que en verdad necesitan... 
Para todo aquellos, hermanos, amigos, conocidos, personas, seres humanos...
Porque somos lo mismo... aunque en estados disparejos.
Ellos si aprecian el significado de este día...
mientras nosotros, continuamos engañados. 

miércoles, 16 de diciembre de 2009

"El mundo te decepciona...

... Pero yo no soy el mundo." 
...

En este momento solo tengo la imagen de tu cara, sonriente,   pero con ironía disfrazada.
Recuerdo ese momento,
esas palabras tan crueles, por ende reales.

El problema es solo recordarlas en situaciones como esta,
en donde lo único que provoca es reafirmar mi punto,
los humanos somos los seres más despreciables de la creación
y si fuimos obra de un ser perfecto... ¿le falta práctica?.
Tema aparte.

Maldita costumbre, maldita... 
parece que la lealtad y todo lo que profesamos, 
para nosotros mismos o para admiración externa, 
es un espejismo de nuestra propia alma hecha pedazos por nuestro deseo y afán
de perfección errónea, de amor a los halagos que alimentan el egocentrismo y el equivocado deseo de justicia, no exactamente para tu prójimo, no exactamente para ti mismo.
Porque da asco ver en lo que nos hemos convertido.  

Y regreso al rincón de los recuerdos, 
específicamente a esas palabras, lo hago una y otra vez.
Intuición o simple don paranormal, no importa lo que sea, nunca te equivocas.

Dejando de lado la ira, la decepción, tristeza, enojo, etc; 
Sé que que al final importa solo lo que queda,
y porque sé que quedas y sabes que yo también, 
por eso y miles de cosas más quisiera agradecerte. 
Sé que en este momento sonríes, de nuevo irónicamente, 
porque tenías razón y sé que sabes que yo también lo sé.

lunes, 14 de diciembre de 2009

Bla bla bla...

Simple desahogo.
...

Porque estoy harto de tanta inmadurez,
de estupideces rebuscadas.

Deseo que me mientas y por eso sigo a tu lado,
o eso es lo que crees, 
o eso es lo que creo.

Harto de consumismo y desprecio,
compra miles de cosas, la desdicha no se lava, no se quita
te corroe y ni siquiera me da lástima.

Porque ya me cansé de ser el idiota,
ese tal al que puedes buscar cuando necesitas algo,
ese imbécil,
mal amigo, olvida todo, perdona todo.

Porque este juego perdió el sentido hace días,
tu control se quedo sin baterías,
pensaste que sería eterno... 
claro, la realidad es solo un cuento incierto. 

Ahora calla y asiente.
calla y disfruta, 
continua caminando, 
senderos opuestos, caminos alejados,
un peso menos 
y un espacio vació a mi lado. 

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Cielos despejados

Ahógame en tu silencio infinito,
en tu tranquilidad envidiable,
en tu suspiro inmediato. 
Ahógame en tus ojos, en tus labios. 

Dejame tocarte un momento,
compartir tu belleza,
apreciar cada instante.
Dejame permanecer a tu lado.

Embriágame de tu pureza,
de tu locura,
no dejes que me detenga,
no te detengas jamás.

Acompañame aunque no tenga rumbo fijo,
en cada paso,
aunque estemos perdidos.
Acompañame en este sendero interminable.

Tómame de la mano,
no tengas miedo, 
prometo no soltarte.
Tómame y olvida.

Has que este instante nunca se detenga,
respira, 
sonríe,
suspira,
abrazame,
pero por favor que nunca se detenga.

 

martes, 1 de diciembre de 2009

Paraísos instantáneos.

Hay cosas que nunca cambian. 
...

Ahora recuerdo como solía recorrer este denso camino,
sonriendo o intrigado. 
Lentamente sentía la presencia de su grandeza,
inspiraba temor, pero también me arropaba mientras continuaba caminando.

A lo lejos se podía observar esa vieja casa al lado del sendero,
cubierta por una gran cantidad y variedad de arboles,
hojas con diferentes tonalidades,
flores con infinidad de olores,
sonidos uniformes como una serenata a la vida. Un canto al tiempo.

A medida me acerco a ese viejo montón de madera,
desgastado por la crueldad del olvido,
como quien implora un respiro.
A medida me acerco a ese viejo lugar en donde me divertía hace mucho tiempo.

Pareciera que siempre regreso a este lugar en otoño,
las hojas caídas cubren como un manto atípico ese pequeño lago.
Recuerdo que siempre tuve miedo a sus aguas verdes y profundas,
ahora que regreso sigo sin atreverme a mirar de cerca.

La vieja cabaña continua deshabitada,
guardando los misterios de un lugar mágico y escondido,
de ese lugar en el que no parece transcurrir el tiempo,
pero continua envejeciendo a ritmo lento.

Los sonidos de mis pasos al caminar sobre sus antiguas tablas
despiertan todos aquellos momentos de mi infancia,
cuando venía seguido a jugar aquí. 

Y al llegar la tarde,
completamente agotado, subía a la terraza
y sentando en la única silla del lugar
contemplaba ese hermoso paisaje,
solitario, abandonado.

Aun recuerdo como soñaba,
admiraba ese hermoso paisaje...
disfruté del aroma que despiden las flores,
caminé por ese sendero interminable, hasta que llegó la hora de retirarme.
Ahora como hace años regresé, y me alegro de haberlo hecho.

Aunque solo sea un viejo y sucio cuadro en la sala de mi casa.