sábado, 23 de enero de 2010

Un toque de sentido común... Y Reggaeton.

¿Se puede caer más bajo?...
Claro, ¿por qué no?
...

Maldito género musical, si se le puede llamar música a esa aberración.
Pareciera que los humanos no nos cansamos nunca de crear cosas realmente estúpidas, sin sentido. Pero tampoco nos cansamos de alabar a quienes las crean.
¿Quien es más estúpido?

También es cierto que la diversidad es una de las cosas maravillosas de la vida, pero todo tiene sus límites.
El inicio de la canción son 30 segundos o más de uno o varios hombres repitiendo sus pseudónimos, como si los alienados que escuchan sus canciones no saben de quien es.
♪ "Wisin" a.k.a. "Doble U" el sobreviviente... ¿sobrevivió a que? ♪
♪Hector el "father".... deprimente....
♪ ¿Luny Tunes?... Muerte a la mitad de mis neuronas.
Y seguiría pero no recuerdo más en este momento.

¿Cuál es su problema?
Y es que pareciera que en la mente de quienes les componen sus canciones solo cabe el sexo. Ahh y la discriminación hacia la creación más linda de la naturaleza.
Irónicamente les encanta.

Si, aman ser denigradas, aman que les digan que son un objeto sexual, que están gordas si no se ven como las bulímicas que salen en los videos. Adoran eso.
No hay cosas que las excite más que el ♪ Sexo seguro ♪ pero pobre de aquel desdichado que se atreva a pedirles que les ♪ monte el caballito. ♪
Y es cierto, ¿Quien no ha visto a estas ♪ Gatas fieras ♪ bailar dicho género de una manera tan denigrante hacia su persona?

Pero si un hombre le comenta a otro sobre los atributos de una mujer que acaba de pasar a su lado, se convierte en un degenerado sin perdón del señor de allá arriba. ¡Ja!.
Solo puedes ser un maldito pervertido si de tu cuello cuelga una cadena de tamaño anormal, si tu ropa es tan grande que cabría una o dos personas más ahí dentro, si pones cara de estreñido en las fotos, haces gestos ridículos con las manos y tu cerebro es del tamaño de tu... Uhhhh ¿Demasiado grande? ¿Esto se volvió pervertido?.
[Comentario bonus: Así les gusta a las mujeres.]

En fin, a algunos les gusta que sentir el ♪ bizcochito, a otras probar la ♪ gasolina, enseñar el pantalón blanco ♪ o incluso al ♪ perreo darle un paseo. Pero al final somos "libres" de escoger lo que queramos... ¿o no?
Así que ♪ Más flow que tengo que atender ♪ un llamado de emergencia antes que termine el ♪ conteo.

miércoles, 20 de enero de 2010

En tercera persona: Lecciones de madurez.

Y pensar que solo tiene 7 años.
...

Sentado en las gradas del olvidado parque de la colonia donde vivo,
esperaba, no importa el porque, solamente estaba en el lugar indicado en el momento indicado.

A un lado se encontraban 3 niños, entre 7 y 9 años.
Estaban jugando a construir lo que supongo era una ciudad,
utilizaban casi cualquier cosa a su alcance, desde ramas y hojas secas hasta piezas pre-fabricadas y bolsas plásticas.
No sé cuanto tiempo pasó, pero era entretenido ver sus movimientos torpes y des-coordinados; A pesar de eso estaban a punto de terminar. Tan solo lo supuse al ver que uno de ellos se levantó y dijo que iría a traer todos los "carritos para parquearlos".

Caos.
Entre uno de esos movimientos torpes, dos de ellos tropezaron entre si y cayeron sobre la ciudad que tanto les había costado construir.
Casi instantáneamente se levantaron ambos y comenzaron a discutir sobre quien había sido el culpable.
Lo que empezó como un pequeño error de niños parecía un problema tan grande y los gritos no ayudaban a calmar la situación.
Tan normal, tan típico que hasta terminó aburriéndome.

Pero... El más pequeño de ellos, permanecía sin decir nada,
se dedicó solamente a recoger las piezas regadas, levantó una pequeña bolsa plástica del suelo y fue a traer más tierra.
Mientras los otros dos peleaban, él seguía callado, rearmando en solitario lo que juntos habían logrado.

La pelea poco a poco era peor,
lo único que me mantenía soportando tanto grito y viendo golpes bruscos entre ellos, era la actitud de ese niño con camisa anaranjada. Sorprendete.
Cuando los golpes eran cada vez más serios, él tomó dos carritos que acababa de ir a traer y sin alterar su voz dijo: -"Ya estuvo, tu agarra el rojo porque el otro no tiene llanta."-
Los niños lo ignoraron, hasta que uno de ellos terminó llorando y recogiendo sus cosas.
De nuevo lo que tanto le había costado hacer se convirtió en una pila de hojas, tierra y piezas sucias.

Resignado el pequeño niño suspiró y dijo:
-"Si te hubieras disculpado, aunque tu no tuvieras la culpa, habríamos terminado antes y ahorita estaríamos jugando"-
El otro respondió: -"Si ese tonto arruinó todo."-
El pequeño se agachó, tomo uno de los carros restantes lo guardo en su bolsa y dijo:
-"Mañana ya no se van a acordar porque peleaban y nos tocará armarlo de nuevo."-
Mientras caminaba para su casa, levantó su mano y exclamó:
-"Yo voy a ocupar el rojo porque no tiene llanta, así no pelearan, tú ocupa el de carrera y Ricar el otro rojo."

Sé que ese niño sabía exactamente lo que hacía.
Burlarse de la idiotez ajena y tener el descaro de hacerse pasar por el tonto. Simplemente una obra de arte.

domingo, 10 de enero de 2010

El arte de la improvisación y números por nombres.

Porque debe ser un arte.
...

A punto de comenzar uno de los días más incómodos de mi vida, rodeado solo de mujeres deseosas de interrogarme. Fuera de mi territorio, con cierta presión encima.
Suena trágico... Pero podía ser peor.

Demasiados nombres que aprender, demasiadas caras nuevas, por ello decidí identificarlas de otra manera. En resumen: Numeración.

1 + 2 combinación perfecta, de esas personas que es imposible que permanezcan quietas, ya sea con sus comentarios fuera de lugar, golpes en rodillas ajenas o "awww's" espontáneos.
3+4+5... Supe muy poco de ellas, aparte de un par de relatos sobre noches de fiesta entre otras cosas. Son las encargadas de equilibrar tan divertido grupo.
6... La manzana de la discordia, la pequeña bestia poco amigable y sus intervenciones en momentos inapropiados.
8. La última en llegar y quien insiste en sobrepasarse con 9, de las que más preguntaron pero pocas de esas interrogantes crearon momentos incómodos. Gracias.
9. Esa persona que con una simple mirada, un gesto o un par de palabras es capaz de convertir la mitad de una calle en un paraíso, capaz de tornar el frío viento en un abrigo cálido. La dueña del pincel que garabatea en mi cielo.
10. La bienvenida, la ausente y la que se encargó de culturizarnos. Gracias por los dulces.

Pensé que sería una larga tarde, no fue así.
Y entre risas, globos con caritas felices, zapatos regados, preguntas incómodas y sorpresas, terminó uno de los mejores días que he tenido.

Y sé que esto es solo el principio.

sábado, 9 de enero de 2010

Garabatos e imprecisiones.

El cielo este día luce como un lienzo en blanco. 
...

Quisiera ser un gran artista,
capaz de reproducir tu sonrisa
con un solo trazo.
Plasmar en él tu esencia,
compartir tu hermosa inocencia.

Crear rimas y canciones,
escribir poemas bellos,
acariciar tu cabello,
abrazar tus temores.
Deleitarte con una lluvia de colores.

Quisiera construirte un palacio con las nubes,
un lugar donde guardar los buenos momentos,
un lugar para escapar juntos
y permanecer suspendidos,
como dos almas eternas.

Este día el cielo luce como un gran lienzo,
manchado por mis garabatos
e intentos fracasados.
Luce como un deseo efímero y sincero
de hacer algo lindo, arte rebuscado.

Y solo espero seguir dibujando
cada segundo,
trazo a trazo,
una sonrisa infinita,
dos ojos que brillan como luceros,
dos almas juntas
tu y yo en él inmenso lienzo en blanco.

viernes, 8 de enero de 2010

Diario de navegación: Tormenta inesperada.

No soportará, no soportaré.
...

Escucho el rugido del viento, es estremecedor.
Las obscuras aguas bajo mis pies son el peor preámbulo de la mejor historia que podría contar. Tal vez no lo logré.
Mis piernas tiemblan, mis brazos titubean. ¡Soy un cobarde!.
Aun me queda la excusa de ser humano; Por tanto temo a lo desconocido.
Pero es simplemente eso... una excusa.

La vieja madera de mi bote empieza a quebrarse por los golpes violentos del agua,
he perdido la mayoría de las provisiones, viejas páginas,
objetos y diferentes cosas que traía conmigo. Incluso el coraje.

Empiezo a perder la esperanza también,
el miedo y el frío me han dejado inmóvil,
a merced de tan terrible monstruo.
Todo empieza a nublarse y cada segundo que pasa
empeora.

Y ahora me encuentro rodeado por un manto azul
 y por seres con vestimentas negras.
-¿he perdido la razón?- me pregunto a mi mismo.
El eco de este lugar parece burlarse.
Veo algunas aves blancas, vienen hacia mi.
El débil murmullo de los seres desconocidos me perturba.
Escucho el sonido de dos objetos pequeños golpeando,
suenan como monedas.
- ¿Ráfagas de viento en un lugar como este? -

Como si nada es un nuevo día.
No recuerdo que sucedió ni porque soy digno de contemplar un nuevo amanecer.
Empiezo a pensar que esto realmente no vale la pena.
- No, no vale la pena. -

...

viernes, 1 de enero de 2010

Herencia

"Gastando pólvora en buitres." 
...

Con un semblante intimidante, tamaño atemorizante
y carácter tan penetrante e hiriente como ningún otro. 
Por mi afición a la mafia desde pequeño pensé que el sería el típico Don, 
el respetado y temido por todos a su alrededor. Sin saber que dentro de esa coraza de acero se encontraba el ser humano más ejemplar que he tenido la dicha de conocer.

Con ese aspecto cansado, pero con un brillo inigualable en sus ojos, 
comienza cada día dos horas antes que el resto del mundo, 
con esa paciencia, que solo la edad puede ser capaz de moldear, camina por la vida, 
lleno de tantos recuerdos, tantos errores, pero tan solitario, tan olvidado.

Nunca conocí a alguien con un respeto y una fe tan grande hacia la religión que profesa. Y no es el típico hipócrita que se sabe la biblia de memoria pero no tiene espacio para su prójimo en la mesa. Tampoco es el que espera que sirviendo en grupos y asistiendo a misa tiene apartado su pedacito de cielo. 
Es de esos seres humanos que no merecen ser llamados así, porque no es uno más.
Porque ha entregado su vida para los que lo rodean, porque ha vivido en el infierno y ha acariciado el paraíso. Porque puede jactarse de ser bendecido una y mil veces, pero nunca lo hizo, no lo hace y no lo hará.

Sabe que todo lo que ha logrado lo ha logrado por su cuenta y no por eso se encierra en una esfera de egoísmo. Sonríe como niño cuando comparte todo eso. 

La última noche de uno de esos años que no quiero recordar, si acaso el olvido existe, permanecimos sentados solamente esperando por tradición. 
Poco a poco lo que comenzó como una simple conversación termino siendo una ventana hacia su vida, hacia ese recorrido tan largo pero tan corto, comparado con la infinidad del tiempo. 

Cada palabra que salía de su boca llevaba impregnado un sentimiento tan grande y tan profundo 
que fácilmente se confundía la realidad con el evento narrado.
Esa mezcla exquisita de experiencia y repeticiones continuas de hechos desafortunados solo podían desencadenar la sabiduría más grande, la sabiduría más valiosa.

Las horas pasaron muy rápido, el nuevo año inició, más que todo como acto simbólico y necesario para los humanos. Para engañarnos un momento y pretender que tenemos una segunda o tercera oportunidad aun sabiendo que las tenemos todos los días, sin importar hora o fecha.

Y aunque no tenga las riquezas, el oro, los diamantes o miles de joyas, sé que esas últimas horas del año fueron el mayor regalo que alguna vez pude recibir, que todo eso que compartió conmigo no es el secreto de la felicidad o el sentido de la vida en si.
Pero sé exactamente lo que intentó decirme. 
"Y lo demás será, siempre lo de menos."