lunes, 1 de junio de 2009

Delirios y grandeza

Cuando todos los dias t levantas con el pie izquierdo... es hora de cambiar de posicion la cama!
...
Trapaso de mando presidencial, celebración en el estadio... que podria salir mal?
Y asi comenzo el dia, tan normal como de costumbre, de no ser por que nunca mis dias son normales, por que si algo se puede complicar.................... ¡se complicará aun más!

Era casi mediodia, y la entrada al estadio era un infierno, tal vez por el sofocante calor o por que habian cientos de personas intentando pasar por una pequeña puerta, no lo sé.
Entre golpes y empujones logramos entrar. Y de nuevo bajo el sol.
Esperando por una sola cosa: Ver al nuevo presidente de nuestro GRAN pequeño país.

A medida se llenaba el lugar se comenzaban a ver vendedores "promocionando" sus productos, cuyo origen es mejor no conocer, se comenzaban a ver cada vez más y más personas, y es cuando te das cuenta que algo podria salir mal. Mientras sonaban en el fondo canciones de diferentes grupos de artistas.

Y asi pasaron las primeras horas de espera, evitando los golpes de los objetos voladores rara vez identificables, golpes de personas, golpes de las sombrillas de las personas y hasta evitando lo inevitable: comprar bedida o alimentos en el estadio.
Pasada la hora de almuerzo decidi comprar algo para comer, primer error.
A pesar que los vendedores o no pasaban o simplemente me ignoraban, logre comprar comida!. Segundo error. Y para no hacer mas largo el cuento, ha sido el dolar peor gastado en mi vida.

Luego del desastre con la comida, bebida, golpes de bolsas con agua y calor, lo que faltaba, lluvia.
Las primeras gotas caian, se empezaban a ver muchas sombrillas abiertas y hasta parecian sonreir, como burlandose de mi poca fortuna y de mi ropa manchada por las primeras gotas de lluvia. Y la música en el fondo seguia.

Entro la noche, la lluvia ni siquiera alcanzo a mojarme el pelo (quien se rie ahora de las sombrillas). 7 Horas de espera y ni la más minima señal de nuestro objetivo.
A mi compañera en esta odisea ya se le notaba el cansancio y la desesperación. Me queda la duda si fue por la larga espera o por que ya estaba cansada de tanto reirse de mi suerte.
Y por fin sucedió, despues de 8 horas de espera bajo el sol, bajo la lluvia y tras haber probado la mejor gaseosa de mi vida (cuento aparte)..... logramos lo que queriamos.
Era el momento cumbre del dia, la música de fondo habia parado, nuestro PRESIDENTE daba su discurso, mientras nosotros solo deseabamos que el dia terminara.

Cansados, aburridos, adoloridos, era hora de retirarnos, no sin antes disfrutar de la música de fondo, que repitió las mismas canciones durante todas las horas de espera.

Era hora de volver a casa. Y mientras caminaba de regreso a mi hogar mire el cielo y sonrei... pensando:
Simplemente esto es KARMA.

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